Hoy celebramos el «Día Internacional de la Narración Oral», fecha que nace en Suecia en 1991, con el objetivo de que la mayor cantidad posible de narradores cuenten historias en todo el mundo, en todos los idiomas.
Y continuamos con la narración indescriptible, inverosímil y cínica que hay en nuestro país. El caso de Jalisco en el rancho Izaguirre se ha venido enturbiando con el paso de los días.
Además del ya de por sí desayuno en el cumplimiento de los procesos por parte de la Fiscalía de ese estado, por parte del gobierno anterior, se suman situaciones que parecen montajes sobre el caso, solo para saturar y confundir a la sociedad Ahora son más las dudas que la certeza, las preguntas que las respuestas.

Entre las cosas que el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco denunció está la existencia de hornos crematorios, hecho desmentido por la Fiscalía estatal, denostando a lasadres buscadoras. Además, al día siguiente se pública un video en redes sociales donde presuntos integrantes del cartel Jalisco Nueva Generación no solo niegan rotundamente la existencia dele un campo de exterminio, sino que acusan a Guerreros Buscadores de crear una historia de terror, para incendiar las redes sociales. Este video parece más un montaje para hacer quedar mal al colectivo y carece de imagen, discurso y significación de otros videos del CJNG.
Por otro lado, de manera anónima, una supuesta ex integrante de Guerreros Buscadores de Jalisco dice que se trata de una cortina de humo y que a muchas de las víctimas las sepultaron en los cerros aledaños, e incluso señala a Indira Nadar, la líder del colectivo que hizo el hallazgo, de haber traicionado a quienes trabajan para encontrar desaparecidos, magnificar las cifras y los hechos de Teochitlán.
Sin embargo, quitando la paja y el polvo, lo que en realidad importa es la verdad sobre Teuchitlán, sobre el reclutamiento forzado, los números de las desapariciones, por encima de intereses políticos y personales.

Las preguntas no se detienen, seguirán presentes. Su relación con otros sucesos anteriores y hallazgos como en La Barca, siguen ahí.
¿De quiénes es la ropa encontrada en el rancho? ¿qué pasó con los dueños del predio que se dice fueron despojados del terreno y dónde están? ¿Si antes no habían visto zapatos, ropa y restos, cómo llegaron esos objetos al predio, si en teoría estaba resguardado por la Fiscalía estatal o por la Guardia Nacional?
Lo cierto es que en Teochitlán se encontraron huesos, pertenencias, hornos, balas… ¿cuál es la historia de este sitio y de muchos otros encontrados en todo lo México?
Otro hecho es que sí parece el modo de operar del CJNG, y, sin embargo, no es el único que tiene esas prácticas. Hay redes de reclutamiento, redes sociales, redes de transporte. El periodista Oscar Balderas, por ejemplo, señala que la Interpol tiene identificado, entre otras cosas, que México es uno de los países en los que opera un sistema de reclutamiento conocido como ‘matanza de cerdos’ usado para reclutar personas mediante falsas promesas de trabajo o para hacerlas trabajar en una especie de call centers que se dedican a la extorsión.
Jalisco es la entidad que registra el número más alto de personas desaparecidas y no localizadas con más de 15,000 casos.
Hay mucha tela de dónde cortar, este caso abrió la puerta contundente a la problemática terrible que hay en este país, en un momento donde todos los ojos ponen atención en México, las crisis de inseguridad, los vínculos entre el gobierno y los criminales, la credibilidad del Estado de Derecho mexicano.
Y en este entorno, el grito interno de la sociedad que busca y que hunde sus manos ciudadanas en fosas clandestinas, mientras las autoridades critican, omiten y minimizan una situación de la que ya no tienen control y tampoco parecen tener voluntad para solucionar.