Se rompe la hegemonía que la derecha mantuvo por muchos años y, que enquistada en el poder provocó un retroceso en el desarrollo del municipio
Atlixco, Puebla.- Desde el pasado primero de octubre, en Atlixco inició la cuenta regresiva para la transición de poderes que se llevará a cabo la próxima semana, y en la que se rompe con más de 20 años de hegemonía derechista que, durante ese tiempo, provocaron un retroceso en el desarrollo del municipio al velar por intereses particulares de quienes ostentaron el poder, muy por encima de los intereses de la población de esa región del estado.
Ariadna Ayala constituye en Puebla la digna representante de la Cuarta Transformación, que encabeza el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no sólo por su trayectoria política, sino también profesional, que la hacen para muchos habitantes de ese municipio y esferas de poder, la persona idónea para cambiar las cosas en Atlixco.
Este 14 de octubre, los atlixquenses vivirán un cambio importante en sus vidas al contar con un nuevo gobierno, emanado de la izquierda, encabezada por los partidos Morena y PT, que impulsaron la candidatura de quien hoy se convierte en la primera mujer en gobernar Atlixco.
Con un triunfo contundente el pasado 6 de junio, Ariadna Ayala demostró que los habitantes de este Pueblo Mágico querían ya desde hace mucho tiempo un cambio verdadero, y terminar con las atrocidades que cometía su actual alcalde, Guillermo Velázquez Gutiérrez, de quien denunciaron a este medio que dejó de atender las demandas de los pobladores en general y se dedicó a otros proyectos políticos.
Incluso, señalaron que, al convertirse en una carta importante de su partido, el Acción Nacional, pudo ser el candidato al gobierno del estado en pasadas elecciones en los más recientes años controversiales que vivió Puebla en lo que fue el fin del morenovallismo, aunque no paso de eso, de ser una nominación, pero al que final de cuentas lo distrajo de sus principales responsabilidades como alcalde.
Al no conseguir sus objetivos, pobladores señalaron que Velázquez Gutiérrez se dedicó a buscar la reelección, lo que también orilló a no sólo desviar la atención y los recursos humanos para cumplir esa meta, sino también se presume que desvío recursos económicos y materiales para enquistarse en el poder por tres años más.
Sin embargo, esa fue su segunda y última derrota en el ámbito político, pues perdió las elecciones con amplio margen, que evidenciaron el hartazgo de la gente por él y su administración.
Hoy se sientas las bases para un nuevo comienzo, una nueva era, en la que Ariadna Ayala teje ya las relaciones con diversos sectores y políticos de los tres niveles de gobierno con el fin de arrancar con programas y acciones que le permitan con hechos y no palabras demostrar su capacidad y su compromiso de llevar a cabo ese anhelado cambio que exigen los atlixquenses.